En algunas ocasiones las existencias pueden estar erróneas o no se lo podremos conseguir en el plazo señalado. Confiamos en su comprensión y le agradecemos la confianza depositada. Esperamos no defraudarle.
Cómo dar una buena clase se fija en cómo los nuevos comunicadores digitales captan la atención, aunque sin perder nunca de vista que una clase entretenida no es necesariamente una clase fructífera. El buen enseñante necesita cultivar la humildad, no rehuir ni abusar de su poder, saber gestionar el rechazo, planificar bien tiempos y contenidos, manejar el storytelling y, además, crearse un personaje. Eso sí, mejor que sea uno alejado de los clichés románticos tipo El club de los poetas muertos. Aquí los autores aportan claves realistas y pragmáticas (y algo de mindfulness) para sobrevivir a la dispersión de la atención a la que obliga el contexto digital. No hay recetas milagrosas y sí un único camino: «Prueba. Intenta. Arriesga. Falla. Sé profesor».
Este sitio web sólo utiliza cookies propias. Puedes configurar la utilización de cookies u obtener más información aquí
Más información sobre el uso de "cookies" y sus opciones de privacidad
Este sitio web utiliza cookies propias que se detallan a continuación en el panel de configuración.
A través del mismo, puede aceptar o rechazar de forma diferenciada el uso de cookies, que están clasificadas en función del servicio. En cada uno de ellos encontrará información adicional sobre sus cookies. Puede encontrar más información en la Política de cookies.
Estrictamente necesarias (técnicas):
Se usan para actividades que son estrictamente necesarias para gestionar o prestar el servicio que usted nos ha solicitado y, por tanto, no exigen su consentimiento.